Inspirado en la sensación primordial de protección y refugio, se diseñaron 5 “nidos” donde los huéspedes se sentirán abrazados y protegidos, creando un verdadero escape de la vida urbana y dándoles la posibilidad de reconectarse con la naturaleza, con la comunidad y consigo mismos. Este proyecto representa un nuevo concepto de ecoturismo y una gran oportunidad de conexión con la naturaleza inspirado por el Caribe y la selva tropical.
El proyecto, 46,181 metros cuadrados, se desarrolla dentro de un terreno de 5.9 hectáreas, por medio de 3 edificios residenciales y 2 hoteles con un total de 204 departamentos, 167 habitaciones y 16 villas privadas; además ofrece lujosos espacios comunitarios integrados con la naturaleza como jardines en la selva, increíbles villas al aire libre, un pabellón multiusos, zonas de recreación y esparcimiento, restaurante y un “nido” panorámico con impresionantes vistas al Caribe.
Cada una de las amenidades y espacios sirven para dar una experiencia única y crear un lugar mágico para el huésped a través de un amplio vocabulario de elementos visuales que se transforman en lenguaje de diseño, en materiales y formas, que representan a México y crean una arquitectura biomimética. Así mismo, la inspiración para cada uno de los “nidos” se centró en la creación de Cenotes, como punto de interacción y cohesión social, y como una oportunidad de vivir los rituales sagrados de los mayas.
El diseño biomimético es aquel que busca imitar los modelos, sistemas, estructuras y procesos naturales con el fin de resolver problemáticas humanas de forma más práctica y eficiente. El objetivo principal del proyecto es lograr un serie de espacios que favorezcan el equilibrio mente-cuerpo-alma proporcionando un verdadero escape de la vida cotidiana, mientras permite al huésped desconectarse y relajarse de la mejor manera, es por eso que las áreas del spa, los saunas y las piscinas se diseñaron cuidadosamente y tomaron un papel importante dentro del proyecto.
El estudio hace hincapié en el concepto de sostenibilidad al respetar profundamente el ecosistema y la biodiversidad, utilizando materiales locales que minimizan el impacto de la construcción, mientras se favorece el aprovechamiento consciente de los materiales y se disminuye la generación de residuos. La recolección de agua pluvial se utiliza para el tratamiento de aguas residuales y el riego de jardines.
En cuanto a la electricidad, la ubicación del complejo permite la utilización de paneles solares, de esta forma se evitan las grandes instalaciones eléctricas convencionales que pueden dañar el ecosistema. Por último, y no por ello menos importante, se utilizó el sistema de construcción “en seco”, en el cual no hay adhesivos húmedos, el tiempo de ejecución es más corto y se aumenta la seguridad durante la construcción y se enfatiza la sostenibilidad total del proyecto.
Fuente: AD Magazine[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
Add comment