Nunca faltan los vinos: Una cena romántica requiere un espacio adecuado, ya sea un restaurante o un comedor bien ambientado, una comida deliciosa y el vino que conecta todo, encendiendo los sentidos, invitando a disfrutar el amor, y la compañía.
Pero ¿cuál de todos los vinos es mejor? Esta puede sonar como una pregunta complicada para quien desconoce completamente de vinos (en especial en una primera cita), sin embargo, existen algunas bases que todos pueden seguir para encaminarse hacia el vino perfecto para la cena.
El mejor vino para una cena romántica
Cuando se habla de cenas románticas ya sea dentro de casa o fuera, el vino tinto es considerado el acompañante ideal. Aunque algunos prefieren el Champagne, creemos que tiene un sentido de celebración por lo que puede usarse para festejos específicos como un aniversario, una cena de compromiso o algo similar. Sin embargo, cuando se trata de una cena romántica, ya sea en restaurante o en privado, el vino tinto da ese sabor que encaja con la cena y que le añade el toque sensual al encuentro, siendo perfecto para poner a fluir la sangre y establecer el mood.
El vino tinto se hace de variedades de uvas con una tonalidad más oscura y su color puede ir desde el violeta hasta un poco más café para los que tienen más edad. En total existen 50 tipos diferentes de vino tinto, así que puede ser un poco complicado elegir entre uno. Los siguientes son los más comunes y los que encajan ideal con una cena romántica. Pero, si realmente quieres lucir como un experto, necesitas descubrir todas las variedades y explorarlas en cada cena.
Merlot
Posiblemente el más común y muy sencillo de encontrar. Se hace con las uvas que se usan para el vino de Bordeaux. Suele tener un sabor suave y elegante con bastante cuerpo, y es bastante flexible cuando se habla de mezclar con comida.
Cabernet Sauvignon
Otra de las variedades más comunes, que tiene bastante similitudes con el Merlot pero un poco más suave que hace que encaje perfecto con carnes rojas, aunque también se puede disfrutar solo con un postre. Suele tener buen cuerpo, y un sabor muy específico que sólo cambia en Australia donde toma tonalidades de mentol o eucalipto.
Pinot Noir
Ideal para cuando buscas algo diferente y único. Este no es tan fácil de encontrar, pero si lo haces, sin duda sorprenderás a tu cita. Por lo general la uva con la que se hace se asocia con la región de Borgoña en Francia, conocida por sus vinos. Su color es más ligero, su cuerpo es mediano y suele tener aromas de cerezas y fresas que lo hacen el ideal para una cena romántica.
Syrah
Otra variedad para sorprender a tu cita. Aquí podemos encontrar tonos de especias como anís, regaliz y frutas más suaves que surgen de una uva procedente de dos uvas del sur de Francia. Tampoco es tan común encontrarlo.
Por supuesto, no solo se trata de la variedad sino de la marca del vino y de las botellas que podemos conseguir. Aquí el panorama es muy amplio y se trata de probar, sin embargo, podemos tomar algunas sugerencias hechas por Forbes, además de que puedes revisar nuestras previas recomendaciones de vinos:
- Château Lassègue Saint-Émilion Grand Cru, 2011
- Conde de los Andes Rioja, 2015
- Penner-Ash Zena Crown Pinot Noir, Oregon, 2016
- Pazo Cilleiro Albarino, 2017
- Aia Vecchia Sor Ugo Bolgheri Rosso Superiore, 2016
- Sea Smoke Sea Spray Blanc de Noirs, 2014
- Tenuta di Lilliano Gran Selezione, Chianti Classico, 2015
Nosotros recomendamos experimentar y si no te gusta uno, cambiarlo por otro hasta encontrar el sabor ideal para cada ocasión.
Fuente: GQ