El diseño del espacio de trabajo es uno de los puntos más importantes para las empresas en relación con sus empleados. Cada vez que abren una oficina tienen que estudiar cuidadosamente cómo reparten el sitio disponible para que sus plantillas trabajen con comodidad y su productividad sea la mejor posible. Porque sí, la manera en que se realiza el diseño del espacio de trabajo sí guarda una relación notable con la productividad de quienes trabajan en él. Por eso precisamente no se trata de un proceso sencillo.

Además, ahora, con las medidas sanitarias en vigor, toca tener más precauciones si cabe. También pensar en espacios de trabajo que resulten cómodos además de evitar riesgos. Por eso es habitual que de ello se encarguen expertos, con formación superior en Diseño de Interiores. Pero también hay que cuidar el diseño del espacio de trabajo en casa, dado que todo apunta a que en muchas empresas el teletrabajo se va a seguir manteniendo. Al menos, durante parte de la semana.

Hace ya tiempo que quedó claro que no se puede trabajar bien desde la mesa de la cocina o en un rincón del sofá, por lo que es aconsejable diseñar con cuidado el lugar desde el que trabajar. De esta manera se puede rendir más y mejor.

Diseño del espacio de trabajo en la empresa

La oficina tal como la hemos conocido hasta el inicio de la pandemia es ya cosa del pasado. Ahora hay que crear espacios más amplios y mejor ventilados, en el que los empleados se sientan más seguros y tranquilos. De esta manera conseguirás que estén más cómodos y concentrados. Por lo tanto, que su productividad suba. Por eso, en el diseño de espacios de trabajo actual se tiene en cuenta, en prácticamente todos los casos, que la distancia mínima entre trabajadores debe ser de dos metros.

La mesa desde la que se trabaja debe ser amplia, y el mobiliario utilizado para sentarse, tanto en el puesto de trabajo como en otros puntos de la empresa, como las salas de reuniones, debe ser ergonómico para una mayor comodidad. La luz natural es también muy importante. No solo para evitar tener que trabajar con la luz encendida la mayor parte del día. También para los ánimos de los trabajadores, que consideran en su mayoría que la luz del día, natural, es más agradable para trabajar.

El espacio de trabajo tiene que resultar cómodo para todos los empleados que trabajan en él. También para quienes lo limpian, por lo que diseñarlo pensando en superficies y materiales de fácil limpieza es muy importante. Los vidrios y el metacrilato, que se limpian con rapidez, deben tener mucha presencia, por lo tanto. Y ahora, por temas de seguridad. También hay que tener en cuenta los antibacterianos.

Espacios flexibles y abiertos

El diseño del espacio de trabajo tiene también que tener en cuenta que a menudo hay que improvisar sitios para reuniones. También que puede que se incorporen más trabajadores a la plantilla. Por eso es necesario crear espacios flexibles, que puedan improvisar una sala de reuniones colocando una mampara. Porque la prioridad en el diseño del espacio de trabajo, y hacia donde apuntan todas las tendencias, es hacia la creación de zonas abiertas. Los cubículos cerrados, muy presentes en oficinas hasta no hace mucho, son cosa del pasado.

Este tipo de espacios cerrados se utilizaban mucho como separación entre puestos, pensando que fomentarían la productividad. Pero la realidad es que provocan sensación de soledad en muchos trabajadores. Y dificultan su ventilación. En todo caso, de instalarse cubículos, no deben ser completamente cerrados, y servir únicamente para separar puestos de trabajo. Una división de poco más de un palmo de alto entre mesas será suficiente. Así también se mejora la comunicación entre compañeros y miembros de grupos de trabajo.

También hay que reinventar y variar el diseño de zonas comunes. Como las salas de reuniones. La tendencia lleva hacia salas con menos plazas presenciales, con los reunidos con espacio suficiente entre ellos. Pero dado que muchas plantillas trabajarán ahora parte en presencial y otra parte en remoto, deberán estar preparadas para mantener videoconferencias entre los presentes en las salas y quienes se conecten a distancia.

Con el espacio diseñado para que toda la estancia se pueda ver desde el punto de vista de las cámaras de quienes están conectados en remoto se mejora la comprensión entre los participantes en la reunión. Apreciar su lenguaje gestual y postural mejorará la comprensión de lo que dicen. Por tanto, generará menos dudas y hará que quienes participan en la reunión trabajen más seguros. También hay que tener en cuenta que estos espacios también tendrán que ser flexibles, y poder prepararse, en caso de no contar con demasiados, para poder dividirlos y celebrar más de una reunión en ellos.

El diseño del espacio de trabajo en casa

Hace un año muy pocos se habían atrevido todavía a abordar el diseño del espacio de trabajo en casa. Pero la prolongación de las medidas de protección por el COVID ha llevado a varias empresas a prolongarlo. Y aunque muchas están regresando a la oficina, han adoptado modelos mixtos que hacen necesario contar con un espacio para trabajar en casa. Este, en la medida de lo posible, debe ser dedicado. Y contar con la mayor cantidad de luz natural posible.

Si es posible también hay que procurar que esté apartado de zonas de la casa en las que haya mucha actividad de niños y mayores. En definitiva, un espacio tranquilo en el que poder concentrarse y apartado de distracciones. También debe estar decorado con colores suaves, sin estridencias. Y contar con muebles ergonómicos. Sobre todo, la silla.

En caso de que tengas que hacer videoconferencia con frecuencia presta también atención a lo que tendrás de fondo, tras la silla. Pero, sobre todo, que el espacio resulte acogedor, cómodo y agradable para trabajar a gusto en él. Seguro que la productividad de quien trabaja en él se dispara. Así que si tienes que afrontar el diseño del espacio de trabajo en una oficina o en tu propia casa ¡anímate a crear espacios abiertos, cómodos, relajantes y agradables!

Fuente: esdesignbarcelona