1. Encuentro Guadalupe

Recorrer la carretera hacia Ensenada sin notar estas cabinas suspendidas en la montaña es prácticamente imposible. Diseñado por el arquitecto Jorge Gracia, Encuentro Guadalupe se autodefine como un antiresort que se amolda al entorno natural del valle. Aquí no hay teléfonos ni televisión, sólo vistas espectaculares acompañadas de una copa de vino y un servicio impecable por parte de todo el personal.

  1. Hacienda Guadalupe

Uno de los lugares favoritos de los visitantes del valle gracias a su ambiente relajado y romántico. El pequeño hotel boutique estilo hacienda contemporánea cuenta con 12 habitaciones, cada una con su balcón o terraza privada, ideales para disfrutar el paisaje de los viñedos. Su acogedor restaurante y cava de vinos (conocida por ser una de las más completas de Baja California) son el complemento perfecto para tu estadía.

  1. Cuatro Cuatros

11 cabañas sencillas y siete dobles se alzan entre viñedos, montaña y mar. Una experiencia única de camping sin renunciar a todos los servicios de un hotel de lujo inmerso en la naturaleza. Cuatro Cuatros ofrece paseos en bici, degustaciones, clases de yoga y navegación en velero. Debido a su popularidad, es recomendable reservar con varios meses de anticipación.

  1. Hotel Boutique Valle de Guadalupe

Ubicado en el corazón de la ruta del vino, el Hotel Boutique Valle de Guadalupe funciona perfecto para una escapada en pareja o bien para un viaje familiar con mascotas incluidas. Su cercanía con los viñedos más famosos de la zona (La Lomita, JC Bravo, Las Nubes, Barón Balché) hace que sus 21 habitaciones estén en constante movimiento durante todo el año. El hotel tipo hacienda también cuenta con un spa y espacio de caballerizas.

  1. La Villa del Valle

28 hectáreas llenas de viñedos, olivos, huertos y un hotelito de diseño mediterráneo con una privacidad envidiable. Uno de los aspectos que hacen de La Villa del Valle un referente en la zona es su restaurante Corazón de Tierra, considerado como uno de los mejores de Baja California (No. 42 en la edición 2014 del Latin America’s 50 Best Restaurants). El hotel también es uno de los lugares más populares para organizar eventos.

  1. Bruma

Bruma es un gran complejo turístico en desarrollo que incluirá un hotel, bodega, villas residenciales y ranchos vinícolas. Por ahora es posible hospedarse en la casa principal (Casa 8), o incluso rentar el espacio en su totalidad. El objetivo de Bruma es hacer que los huéspedes se sientan como en casa, por lo que no se consideran un hotel, sino un lugar para disfrutar de la naturaleza y el vino en compañía de amigos y familiares.

  1. Terra del Valle

Terra del Valle es prueba de que la zona también ofrece opciones accesibles y hogareñas, sin perder la esencia gourmet de la ruta del vino. Este B&B cuenta con cinco habitaciones espaciosas –cada una con su respectiva terraza y hamaca–, rodeadas de árboles frutales. El servicio, a cargo de sus dueños, es de primer nivel. La estancia incluye un desayuno preparado con productos locales y orgánicos. Lo mejor: el pan de almendras y las mermeladas caseras.

  1. Adobe Guadalupe

El B&B de una de las vinícolas más reconocidas en el valle cuenta con seis habitaciones diseñadas por el arquitecto iraní Neil Haghighat. Esta hacienda de atmósfera rústica también es conocida por ser una de las principales empresas criadoras de caballos Raza Azteca.

Fuente: travesiadigital